Algunos dicen que Alicante es la mejor tierra del sol porque brilla más de 300 días al año. Pero Alicante no solo es sol y playa, esta zona del litoral mediterraneo valenciano ostenta un legado gastronómico y cultural de primer orden….y te lo vamos a demostrar.
ALTEA
Altea es, sin lugar a dudas, uno de los pueblos con más encanto de la Costa Blanca. Si llegas desde Benidorm, por la N-332, verás una imponente iglesia en lo alto de la colina, un precioso pueblo de casas blancas y calles empedradas. Pasea por sus calles y, vayas por donde vayas, las calles del pueblo te llevarán al mar.
CALPE
Calpe es uno de esos pueblos mediterráneos que mejor puede testificar el paso de la historia. Iberos, romanos, árabes, cristianos, y eso se ve reflejado en las calles de su casco histórico.
Lo más característico del pueblo es el peñón de Ifach, una inmensa roca que nace desde el mar y desde donde podrás contemplar las mejores vistas de Calpe y alrededores. La subida es empinada. Ve parando, haciendo fotos y verás que en un momento estás en el mirador.
VILLAJOYOSA
Vayas cuando vayas, piérdete por el casco histórico, pasarás por torres, restos de murallas y casas con el típico estilo medieval. Baja hasta el barrio marinero y desde allí, al paseo marítimo con sus casitas de colores.
ISLA DE TABARCA O ISLA PLANA
Que decir de Tabarca. Es la única isla habitada de la Comunidad Valenciana, aunque en realidad no es una isla, sino un archipiélago, compuesto, aparte de Tabarca, por los islotes La Cantera, La Galera y la Nao.
Vente con nosotros desde Santa Pola y podras disfrutar de sus aguas alrededor de declaradas Reserva Marina Mediterránea, gracias a su extraordinaria belleza y a su abundante flora y fauna.
QUÉ VER EN ALICANTE CIUDAD
Alicante es una de las ciudades españolas que te sorprenderá, es una ciudad volcada al turismo y que cuenta con multiples atractivos entre los que destacan los siguientes:
El Castillo de Santa Bárbara y el barrio de Santa Cruz
Para subir tienes dos opciones. La fácil es coger el ascensor (2,70€) que te lleva directamente a la parte superior. Y la menos fácil, pero mucho más interesante, es subir por las calles del barrio de Santa Cruz. Dejarás atrás la ciudad y te sumergirás en un oasis de tranquilidad.
La Cara del Moro
El castillo de Santa Bárbara está situado sobre la montaña Benacantil, lugar sumamente estratégico en tiempos de guerra. Pero lo más curioso de todo es la forma que tiene la roca sobre la que se asienta el castillo. Desde la playa del Postiguet (la que queda justo debajo), podrás contemplar “La Cara del Moro”.